No tardan en saltar a la palestra aquellos a quienes la confrontación les nutre sus más egoístas intenciones. No falta quién esté celebrando que “vamos a tumbar a Chávez, ahora sí”, en lugar de celebrar que ahora tenemos mayor equilibrio de poder.
No tardan en endilgarle atributos increíbles a Ledezma o a Rosales, cuando sus gestiones están llenas de trazos oscuros y de malos recuerdos para los que vivimos sus gobiernos anteriores. No tardan en negar que, quitándole la camisa roja rojita, Aristóbulo parecía, incluso, mejor opción para el área metropolitana.
Una cosa es que haya ganado la oposición, y otra diferente es que haya ganado el antichavismo. Y es en esa diferencia sutil donde se encuentra todo el meollo del asunto.
No votamos por Antonio en Libertador por ser el mejor, sino porque era la única opción. No votamos en Maracaibo por Manuel por sus aciertos políticos, sino porque no había más remedio. Y así sucedió en la mayoría de los lugares donde triunfó la oposición. Solo Chacao tuvo una verdadera gama de opciones para elegir, allí sí se hizo democracia de verdad.
Lo importante, en todo caso, es que podemos ver en los discursos de triunfo un ánimo para dejar las peleas atrás y empezar a trabajar por el colectivo, verdadera razón de hacer política. Pero no la van a tener fácil.
La revolución solo tiene un pensamiento, una sola directriz y una única manera de acción, y no vacila con medias tintas. Nos toca ejercer contraloría social sobre gobierno y oposición, según corresponda en cada región, para que ni unos pisoteen a los otros ni los otros pongan trabas a los unos.
Libertador particularmente queda aislado. Apoyado, pero solo. Todas las alcaldías del área metropolitana que le rodean son ahora terrenos contrarios, incluyendo la Mayor. Parece que le va a tocar a Jorge agachar un poco la cabeza y negociar la mancomunidad de la Capital, que es una sola porque son iguales sus grandes problemas, e iguales deben ser sus soluciones.
Esperemos que este nuevo empuje de la oposición política los lleve por el camino de la recuperación de espacios con base en el trabajo y no en base a los juegos de poder. Esperemos que el equilibrio obtenido ayude a impulsar planes de desarrollo consensuados y no a la práctica golpista. Esperemos que nuestra clase política se dedique de una vez por todas a gobernar. Ya basta.
Queremos que el camión de la basura pase periódicamente por nuestra calle y no que solo se presente una vez a la semana en el negocio de la cuadra porque el dueño “le da una vainita” para que se lleve sus desechos. Queremos que la policía local nos cuide y no nos matraquee. Queremos que los buhoneros no vuelvan a cundir los espacios libres de nuestra ciudad. Queremos que la limpieza sea un lugar común. Queremos que, si el tema es impulsar el poder popular, el mismo sea inculcado desde lo más profundo y no se quede en el manejo de unos pocos “líderes comunitarios” que solo lo usan para beneficio propio. Queremos que impere el diálogo y no la pseudo-participación de unas cuantas franelas unicolores para decidir lo que le conviene o no al barrio.
Eso queremos señores Gobernadores, eso queremos señores Alcaldes. A recogerse las mangas, porque tienen trabajo.
No tardan en endilgarle atributos increíbles a Ledezma o a Rosales, cuando sus gestiones están llenas de trazos oscuros y de malos recuerdos para los que vivimos sus gobiernos anteriores. No tardan en negar que, quitándole la camisa roja rojita, Aristóbulo parecía, incluso, mejor opción para el área metropolitana.
Una cosa es que haya ganado la oposición, y otra diferente es que haya ganado el antichavismo. Y es en esa diferencia sutil donde se encuentra todo el meollo del asunto.
No votamos por Antonio en Libertador por ser el mejor, sino porque era la única opción. No votamos en Maracaibo por Manuel por sus aciertos políticos, sino porque no había más remedio. Y así sucedió en la mayoría de los lugares donde triunfó la oposición. Solo Chacao tuvo una verdadera gama de opciones para elegir, allí sí se hizo democracia de verdad.
Lo importante, en todo caso, es que podemos ver en los discursos de triunfo un ánimo para dejar las peleas atrás y empezar a trabajar por el colectivo, verdadera razón de hacer política. Pero no la van a tener fácil.
La revolución solo tiene un pensamiento, una sola directriz y una única manera de acción, y no vacila con medias tintas. Nos toca ejercer contraloría social sobre gobierno y oposición, según corresponda en cada región, para que ni unos pisoteen a los otros ni los otros pongan trabas a los unos.
Libertador particularmente queda aislado. Apoyado, pero solo. Todas las alcaldías del área metropolitana que le rodean son ahora terrenos contrarios, incluyendo la Mayor. Parece que le va a tocar a Jorge agachar un poco la cabeza y negociar la mancomunidad de la Capital, que es una sola porque son iguales sus grandes problemas, e iguales deben ser sus soluciones.
Esperemos que este nuevo empuje de la oposición política los lleve por el camino de la recuperación de espacios con base en el trabajo y no en base a los juegos de poder. Esperemos que el equilibrio obtenido ayude a impulsar planes de desarrollo consensuados y no a la práctica golpista. Esperemos que nuestra clase política se dedique de una vez por todas a gobernar. Ya basta.
Queremos que el camión de la basura pase periódicamente por nuestra calle y no que solo se presente una vez a la semana en el negocio de la cuadra porque el dueño “le da una vainita” para que se lleve sus desechos. Queremos que la policía local nos cuide y no nos matraquee. Queremos que los buhoneros no vuelvan a cundir los espacios libres de nuestra ciudad. Queremos que la limpieza sea un lugar común. Queremos que, si el tema es impulsar el poder popular, el mismo sea inculcado desde lo más profundo y no se quede en el manejo de unos pocos “líderes comunitarios” que solo lo usan para beneficio propio. Queremos que impere el diálogo y no la pseudo-participación de unas cuantas franelas unicolores para decidir lo que le conviene o no al barrio.
Eso queremos señores Gobernadores, eso queremos señores Alcaldes. A recogerse las mangas, porque tienen trabajo.
15 comentarios:
Amigos de ProMedio... Casi siempre que puedo leo sus textos y en esta oportunidad tengo un comentario que aplica no sólo para este último post, sino para otros anteriores.
Creo que debemos ser bien cuidadosos cuando tratamos de ser objetivos y caemos en una mera autocrítica que sólo habla mal de un bando. ¡OJO!
Si bien es cierto que del lado de la oposición existen infinitas oportunidades de mejora, no podemos perder el foco de que más allá de todo eso, existe del otro lado un gobierno con excesivo poder y control, en muchos aspectos, de las instituciones del estado.
No podemos olvidar que muchos de los que votamos por un Antonio Ledezma estamos concientes de que no era el candidato idóneo. Sin embargo, más conciente estoy de que lastimosamente hemos llegado al punto en el que votar por un "rojo-rojito" significa darle más poder a un gobierno que está claro de que quiere apoderarse de TODAS las instancias posibles e intentar ahogar cualquier esperanza de la población que sí está de acuerdo con la alternabilidad democrática, el equilibrio del poder y el ejercicio de las libertades sin el temor de ser reprimido, insultado o sancionado.
Sólo esta observación... De resto, como siempre, coincido en muchos puntos con ustedes y agradezco su trabajo y su crítica. Saludos
Pues estoy plenamente de acuerdo. Estoy cansado de que tengamos que estar con o contra Chávez, en un lado o en el otro. Ya basta de gobernantes que nos tratan como un pote de carton chutado en la calle. No somos fichas de un tablero de ajedrez divididos entre blancas y negras. Basta de posiciones excluyentes. O los políticos entienden que es momento de dialogar, concertar y trabajar o en dos años iremos por el refendum de todos y cada uno. No quedará alguno a salvo. El poder popular ya ha sido activado, no hay vuelta atrás.
Algunas primeras señales lúgubres:
"Jorge Rodríguez, alcalde electo del municipio Libertador, es proclamado oficialmente burgomaestre de este municipio en la plaza Bolívar de Caracas (...) La nueva autoridad de Libertador salió al paso aclarando que él no va a trabajar mancomunadamente con ningún otro alcalde (refiriéndose al alcalde Mayor Antonio Ledezma), sino con el pueblo de Caracas y a los gritos de "así es que se gobierna" les mandó un mensaje a los demás burgomaestres electos de la capital, ya que defenderá con "las manos y su corazón" la Constitución del país y aseguró que de llegar a violentarla alguno de ellos, él la defenderá como un "león"".
Noticia completa:
http://politica.eluniversal.com/2008/11/27/pol_ava_rodriguez-promete-un_27A2148975.shtml
Otro ejemplo:
Los Teques.- Contrariamente a las órdenes esperadas de salir a las calles de Los Teques para cumplir con el resguardo del orden público, un grupo de efectivos de Polimiranda permanecieron acuartelados la mañana de ayer en la comandancia, por una insubordinación ante el inspector Peraza, jefe de la Brigada Motorizada.
Yoel Reyes, jefe del organismo, tuvo que hacer frente a la "acción de rebeldía", protagonizada por el subcomisario Carlos Aparicio, quien en compañía de otros 30 efectivos se negaron a entregar la dependencia a las autoridades electas, comandadas por el equipo que será designado en los próximos días por el gobernador Enrique Capriles Radonski, en el Municipio de Sucre.
Noticia completa: http://politica.eluniversal.com/2008/11/27/sucgc_art_policias-de-miranda_1166260.shtml
Después, cuando boten a los pacos estos y a los que andan quemando cajas y documentos en Alcaldías y Gobernaciones (¿pruebas de corrupción?), entonces van a decir que los "escuálidos" están haciendo una "razzia" y una "purga" política.
Como si tuvieran moral para acusar a nadie de discriminación...
¿Habrá paz algún día?
Estoy totalmente de acuerdo es hora que comienzen hacer y a demostrar que quieren un cambio para el pais, para eso le dimos el voto para que trabajen. También es cierto que no se la van a poner facil. Y no pornerse a la par del oficialismo. Hay que ser inteligentes y hacer las cosas bien.
Rosa Coimán
Hola! Nuevamente movido a participar en esta tribuna, expreso mi punto de vista sobre lo ocurrido recientemente en nuestro país.
Muy de acuerdo con lo planteado por los muchachos de ProMedio, y por quienes han comentado posteriormente, sobre el sorpresivo triunfo de Ledezma. Éste debe tener muy claro que, en muchos de los casos, los votos que le dieron la victoria representan una acción de castigo hacia una gestión previa casi nula, por decir lo menos. No es un secreto que el alcalde electo para la Mayor no cuenta con el carisma necesario para mover al ciudadano, pero, lamentablemente, era la opción para aquellos que no querían más de lo mismo.
Digo “lamentablemente” no por la figura de Ledezma en sí, sino por el hecho de haber entubado, casi que obligatoriamente, a esa parte del electorado que deseaba un cambio.
Muchas han sido y serán las lecturas que se hagan de los resultados del 23N. Yo, fundamentalmente, respaldos las siguientes:
Los resultados del proceso electoral reciente, en el que se dio una participación de más del 60%, nos hablan de un respaldo a eso que muchos han pretendido menospreciar y que llaman descentralización. ¿Será que el pueblo está reflexionando sobre la política, y está optando por algo más cercano, más local, y menos utópico e idealista?
Además, tras el 23N, encontramos la consolidación del PSUV y la falta de alternativas sólidas ante la opción del chavismo (los rojos rojitos tienen más claro hacia dónde van, que los que votaron por la oposición).
El pasado domingo la gente dio un espaldarazo contundente a una forma de gobierno: la democracia. Ojalá que quienes resultaron electos también lo hagan. Lo veremos en los próximos días, aunque ya algunos, a través de discursos populistas, pretenden hacer lo contrario, afirmando que gobernarán con el pueblo y no con los contrincantes electos, como si estos últimos no hubiesen sido elegidos por el mismo pueblo.
Alejandro, gracias por siempre estar pendiente de nuestros textos. Es muy gratificante contar siempre con tus apreciaciones y las del resto de los que se atreven a opinar.
Me gustaría aclarar que esto no es una "autocrítica", en principio porque nosotros no pertenecemos a la clase dirigente, ni tampoco apoyamos explícitamente a ningún bando. Nosotros, y esto ya lo hemos dicho antes, no metemos las manos en el fuego por nadie.
Es probable, sí, que en el texto consigas referencias a una sola de las partes en pugna, pero es porque aquí siempre tratamos de decir lo que los demás no se atreven siquiera a pensar. Los medios de información hablan del triunfo de la oposición, y eso no es verdad, triunfaron los antichavistas, quienes entubaron su voto, comop lo dice el amigo Erick, hacia aquellos candidatos que se constituyeron como la opción de la tan mentada "unidad".
Fíjense cómo algunos candidatos oficialistas, ahora alcaldes electos, siguen sin entender el mensaje de los electores. Siguen intentando adueñarse del "pueblo" encerrando ese término en un paquete que solo se reconoce con ellos. Algo como que el "pueblo" son "nuestros" seguidores, no "los de ellos" que son los "ricos" de Petare que tienen "sirvientas y tres carros", así que "nosotros" somos pueblo y "ellos" no, por lo tanto "nosotros" trabajeremos para el "pueblo", no para "ellos".
Esa lógica nos la tienen metida desde hace diez años.
Lo que es igual no es trampa. Si bien las opciones electorales de la oposición no eran las menjores, eran las viables para restar poder a la arbitrariedad propugnada desde el gobierno en sus diversos estratos de poder.
Sucedió exactamente igual que en las elecciones de 1998. La opción de elegir a Chávez era la más atractiva -no la mejor- entre las existentes. Ledezma tiene rabo de paja y lo propio los demás candidatos opositores elegidos.
Sólo hay que esperar a ver si en esta nueva oportunidad que la vida les ofece, hacen de verdad algo trascendente que les catapulte a la historia política como verdaderos hacedores de obras de bienestar colectivo y no omo meros oportunistas: de eso, ya estamos hartos.
Me parece importante que vean esto
http://granfirewallcantv.blogspot.com/
Muy , muy grave
En ProMedio nos preocupa mucho el estado de nuestra democracia. Por eso, junto a Erick, vemos con gran disgusto el habernos vistos casi obligados a votar por unos u otros el domingo pasado. Lo cual no es culpa sólo de los partidos de oposición sino, como bien sugiere Alejandro, de un gobierno que funciona como partido de gobierno y que tiene como fin el control político total(itarista) de cada espacio del país.
El primer problema pudiera ser que, desde un principio, el propio presidente asumió estas elecciones como una manera de medir su poder y, consecuentemente, la oposición hizo lo mismo, a manera de plebiscito... dado que nuestra política hace rato que parece escrita en código binario.
De todos modos, a pesar de todo, yo, personalmente, estoy conforme porque considero que hay un buen contrapeso para el gobierno central en los estados más poblados y eso tiene que ser sano. Ahora, el problema principal que se avecina es el de la gobernabilidad. Se supone que ante el contrapeso debe emerger la voluntad del consenso y la cooperación, pero como el compañero Zarqawi evidenció con ejemplos, no parece existir una disposición de esa naturaleza de parte de los funcionarios oficialistas. No se puede decir lo mismo de los electos opositores pq, al contrario, están obligados a procurar la negociación para sobrevivir
Desde todos los ángulos parece interesante, por ejemplo, dar alguna lectura al hecho de que de los oficialistas derrotados electoralmente, tres fueron pertenecieron al tren Ministerial: Aristóbulo, Jesse y Diosdado; figuras de sigular significación para el gobierno. De los ex-pertencientes al Ejecutivo trinfaron los menos emblemáticos Adán Chávez, Willian Lara y Jorge Rodríguez. Eso puede ser interesante de analizar. No podría descartarse, claro está, que puede ser que el oficialismo haya utilizado sus "mejores hombres" en las instancias más difíciles. Pero eso, en mi opinión, no sería suficiente para explicar el asunto, si es que pueda explicarse..
Por último, fuera del tema, sólo quiero recordarles que no utilicen el "Anónimo" a fin de que podamos distinguir unos comentaristas de otros para incoporarlos adecuadamente al debate...
Bueno en primer lugar, estoy totalmente de acuerdo con el artículo, esta situación era más que evidente mucho antes del 23N, el caso de Ledezma en lo particular es el que más me afecta, ya que durante su mandato como Alcalde de Libertador, sufrí en carne propia la Muy Mala Gestión de este personaje. Independientemente de mi pensamiento político, creo que la elección de Ledezma no va a beneficiar al caraqueño de a pie. Ahora también vale la pena analizar otros casos, por ejemplo el de Miranda donde Capriles Radonski ha sido electo prácticamente por los votos de los Municipios de Caracas, los cuales en mi opinión tienen una realidad distinta a la del resto del Estado. Pero en descarga del Gobernador Electo, este posee un mejor historial en la Administración Publica como Alcalde de Baruta, algo que otros candidatos electos (de oposición y gobierno) no poseen. El caso del Zulia, para mi simplemente no tiene nombre…. Es entendible el apoyo a Pablo Pérez, pero Rosales de nuevo alcalde de Maracaibo??? Esto no puede seguir siendo posible en un país que quiere mejorar su situación Política (imperdonable). También en mi punto de vista el caso de Carabobo merece un análisis, por que en este caso el Candidato de la unidad se beneficio de la discordia entre los factores del Psuv. Pero no solo el antichavismo se pudo beneficiar de esto, el Chavismo duro también obtuvo su parte, como fue por ejemplo el caso de Bolívar, Guárico, Anzoátegui, Sucre, Aragua o Mérida donde la mala elección o falta de líderes regionales opositores, el voto castigo y la falta de interés político de la oposición influyo en los resultados en estas localidades. En fin antes de sacar las cuentas y determinar quien gano el Clásico del 23N, debemos analizar que ganamos nosotros como ciudadanos… a quien verdaderamente afecta el Voto Castigo??? En mi opinión creo que en contadas excepciones, los grandes perdedores somos aquellos que queremos a líderes regionales con voluntad de trabajo, buenas ideas, honestidad y lo más importante enfocarse en la región y la gente que los eligió y no agotar sus esfuerzos en la lucha política que a diario se vive en Venezuela.
No te olvides que ya Chavez ha dicho que los sacara pronto, osea ya vera como pero no los dejara ahi 4 anos. Ya ha dicho que no enviara dinero, ya les ha quitado todo hospitales, educacion, policia, osea un golpe de estado publico. Asi que no seas tan exigente, ya bastante hacen dando la cara y corriendo peligro con esa banda de asesinos que son los chavistas.
Hola Roxi. Al momento de escribir este post (27/11), el Presidente no había dicho mucho sobre los resultados electorales. En todo caso, no creemos que le estemos exigiendo "mucho" a nadie, sino precisamente lo justo: que trabajen y dejen de hacer politiquería, y la exigencia es para TODOS los electos. Dar la cara es lo mínimo que deben hacer quienes nos han metido en este rollo.
No sabemos a qué te refieres cuando dices que "ya les ha quitado hospitales, educación, policías...", ¿puedes especificar?
Y ojo con las generalizaciones, no todos los chavistas son "asesinos" ni todos los asesinos son "chavistas".
Buea los Gobernadores de la oposicion que ganaron se les ha quitado la educacion, la salud, la policia, lo raro es que no ha hecho lo mismo con los gobernadores oficialistas que ganaron.Hay muchas formas de ser asesino, unos chavistas literalmente son asesinos de vidas humanas y los otros estan asesinando la democracia, asesinando el pais, asesinando las esperanzas de un pueblo, asesinando la propiedad privada, asesinando la constitucion, y lo hacen porque? por dinero y por dadivas y para enriquecerese, porque chavez esta creando al hombre nuevo, dependiente del estado de chavez , y eso es ser buen presidente? lo bueno seria que creara mas empresas e industrias para que la gente trabaje, y no que cierre empresas para que el pueblo tenga que obedecer a cambio de dinero, a cambio de alimentos. Es una Cuba que el pueblo, el hombre nuevo, depende totalmente de los Castro, y segun como se portan si son obedientes o no les dan acceso a la universidad, a una casa digna , a un carro , y algunas goyorias. Eso es socialismo , te portas bien te doy pero no mucho no te portas bien no te doy nada y ya veras como sobrevives. Eso quieren los chavistas? no lo quieren pero no saben que a esa situacion estan llegando y no lo quieren ver o no creen porque ahorita estan llenos de odio y complejos y ansias de venganza, pero ustedes seran los primeros que sufriran de su propia venganza.
Resulta que ahora nos quieren llevar a hacer algo a todas luces ilegal (la enmienda) ahora bien. Sabemos que serà aprobada por la AN Pero, lo que no saben es que les puede pasar lo que pasò el 2D
Roxi, Alí, el problema de las generalizaciones y de los absolutismos es que metemos todo dentro de un saco o simplemente adjudicamos una sola visión (la propia) a un asunto y negamos la existencia de otras opciones.
El asunto es que acudimos a los medios y pensamos que lo que nos muestra la pantalla de Globovisión es lo único cierto. Olvidamos que ese chavista violento que aparece en la pantalla no es el mismo que vive en nuestra misma calle.
Mi vecino chavista, mi familiar chavista no es un asesino, y en ese sentido no podemos permitirnos decir que "los chavistas son unos asesinos". Creer que el socialismo es únicamente lo que hace el presidente es un error enorme, Roxi, lee a Marx, no te quedes con el masticado que Chávez nos da por TV.
La enmienda no es del todo ilegal. Y en todo caso, nos parece por acá que es una discusión estéril porque igualmente la van a aprobar, el asunto es que, gracias a Dios y nuestra constitución, que fue hecha con una mayoría chavista pero pensante (no con las almas obedientes de la AN de hoy), todo intento de reforma debe ser aprobado electoralmente, y allí está la solución a todo este asunto.
Hace pocos días un compañero de estudios fue agredido por unos delincuentes en la Plaza Bolívar (porque esos no son chavistas, son unos simples delincuentes). Pero, aún adolorido de los golpes, este compañero me dijo: "Lo único bueno de estas cosas es que uno se da cuenta que los intolerantes son pocos, y tienen el rechazo de todos". ¿Notan la diferencia?
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