julio 03, 2007

Irrenunciable Autonomía

Es una imprudencia encarnar movimientos históricos sin considerar sus contextos. El mayor logro del manifiesto proclamado hace casi un siglo por los estudiantes de la Universidad de Córdoba fue precisamente la génesis de una noción latinoamericana de Autonomía Universitaria para las casas de estudio de nuestro continente. En ese sentido, quienes defendemos la autonomía de las pretensiones intervencionistas, también enarbolamos la misma bandera.

Ciertamente, en nombre de la autonomía son muchas las cosas que se hacen y se dejan de hacer. Es cierto que bajo el mismo marco autonómico nuestra UCV tiene fallas estructurales muy graves: hay burocracia, profesores mediocres, abusos de poder, crisis de representatividad. Sin embargo, todos esos problemas hay que resolverlos aquí adentro. Pedir intervención es un irrespeto a una institución que tiene casi 300 años. Es una ofensa a la gente valiosa que hay y hubo en la Universidad; a los líderes estudiantiles de izquierda que pudieron sobrevivir a la rabiosa persecución de algunos gobiernos; es una traición a Vargas, a De Venanzi, a Bianco, y al mismísimo Bolívar.

También es cierto que la Universidad ha perdido algunos espacios de la vida nacional. Ha perdido vínculos con los barrios. Pero afirmar que la Universidad está de espaldas al país es una aseveración fútil y ruidosamente insensata. O acaso ¿a quién atienden los profesionales que egresan de nuestras casas de estudio?… Sin duda, hay mucho por hacer, recuperar y mejorar, pero la Universidad, aun con sus fallas, está al servicio de la nación, que no al servicio de ningún gobierno, por más revolucionario que se autoproclame.

¿Realmente creen que nos preguntan si somos hijos de burgueses o de obreros al momento de admitirnos en la UCV? Ninguna política de ingreso es absolutamente justa. Negarlo es caer en el juego demagógico o en la inagotable discusión de lucha de clases. Los parámetros no son socioeconómicos. Tienen más que ver con las capacidades intelectuales que con el linaje plebeyo o patricio que tengamos los aspirantes a gozar del privilegio – sí, es un privilegio- de servir al pueblo a través del estudio.

9 comentarios:

leo nieves dijo...

Estoy de acuerdo, el estudio superior es un privilegio que se le otorga al que lucha por obtenerlo y que realmente desea hacerlo.

Hacen falta escuelas técnicas, fortalecer la educación básica y secundaria asi como la orientación que se le da a los alumnos para que opten por seguir estudiando a nivel universitario o decidan convertirse en profesionales de oficio.

Espero que el Gobierno de turno se dedique más a la solución de problemas que afectan al sector educativo, que a la ideologización del estudiantado para que sigan una línea de pensamiento teñida de color.
Saludos.

Unknown dijo...

La verdad me parece exagerado el tildar de traidor a quien aboga por la intervención.

Para mí es necesario que hayan intervenciones administrativas basadas en crieterios predeterminados, en el caso de la ULA: Aquí no hay la masa crítica suficiente como para hacer un cambio desde dentro.

Mi familia era de clase baja en el momento en que entré a la Universidad. Pasé momentos muy duros y agradezco el tener una educación de primera, pero precisamente porque sé que es difícil cuando uno está en lo más bajo de la escala socioeconómica es que abogo por esa intervención. No puede ser que los recursos se derrochen en cosas inútiles mientras las necesidades urgentes permanecen inatendidas. No puede ser que se propicien estructuras tan verticales como el gobierno que impiden el más mínimo acto de justicia cuando el agresor es un profesor. No puede ser que se admita la piratería bajo la bandera de la libertad de cátedra.

La cosa es que la intervención necesaria para rescatar la universidad no es algo que este gobierno vaya a hacer, va a hacer una intervención para moldearla a su antojo sin corregir sus vicios. Y eso es algo peor que lo que ya tenemos.

Unknown dijo...

Amigos Ucevistas, muy pertinentes sus reflexiones, yo pregunto:¿quienes son las autoridades que nos gobiernan en nuestra Casa?son ellos realmente representativos del sentir universitario actual?¿Cuantos asambleistas de Facultad y miembros del Claustro Universitario conocemos? Ya los candidatos para el proximos Gobierno y Co Gobierno Universitario de la UCV estan cuadrados....sabemos quienes son? y que universidad nos estan proponiendo? ahhhh,bueno,reflexionemos y actuemos!

Yimmi Castillo dijo...

Amigos, gracias por participar.
Compañera Janet. Muy pertinente tu reflexión en cuanto debemos re-pensar el carácter político (o politiquero) que tienen las elecciones internas.
Siempre he pensado que la UCV es una "Venezuela chiquita", y como tal, la situación política se ha reflejado en ella (candidaturas entubadas, divisiones, extremismos, etc).
Debemos cambiar eso? Podemos hacerlo? Es necesaria la intervención del estado para ello? No sería peor el remedio?
Esas son las preguntas que debemos responder y actuar luego en consecuencia.
Reitero las gracias y los invito a ayudar a la propagación de este espacio.

Anónimo dijo...

La UCV posee plena libertad para elaborar sus reglamentos y normas, entre las cuales se establecen ciertos criterios para permitir o negar el ingreso a las facultades y sus respectivas escuelas. Si bien es cierto que la educación en el país no debe ser frenada independientemente de la clase social, raza o creencia, también se debe tomar en cuenta la capacidad intelectual de las personas, al momento de permitir el ingreso. Por esto, la uni posee métodos de admisión que ponen a prueba el conocimiento académico de los aspirantes. Como estudiante de una carrera científica (Nutrición y Dietética), lo veo como la misma Selección Natural que se realiza en el medio ambiente, en este caso sería la entrada del más indicado de acuerdo a su capacidad intelectual.

Es cierto que la educación básica es indispensable para obtener los conocimientos fundamentales que se ampliarían luego en la universidad, y si la misma no se obtiene de manera firme, se hace menos probable la posibilidad de ingreso a una universidad que exige cierto conocimiento. Y tomando en cuenta la calidad de enseñanza de la mayoría de las escuelas públicas y privadas, se puede entender el porque hay más ingreso de personas de determinados sectores sociales.


Pienso que nuestro objetivo en la UCV es obtener un conocimiento que luego pueda ser utilizado en beneficio del país, lo cual sólo puede ser logrado por personas que se encuentren aptas para asumir la responsabilidad que esto significa. Me parece más inteligente por parte del gobierno, el perfeccionamiento de la educación primaria y secundaria para así garantizar el ingreso a las universidades de individuos que luego serán profesionales que proporcionaran avance y EVOLUCIÓN al país.


Bueno… Y en este foro no se habla de Frank! (k) jAjAjA

Yimmi Castillo dijo...

Gracias A. Ortiz. Sobre todo por prestar atención a otro post que no sea el del CEECS (que ya deberíamos cambiarle el nombre a "Ponle el cascabel a FranK")
Tu postura se aproxima mucho a lo que decimos en este texto. Pronto seguiremos escribiendo sobre el tema de la Autonomía para seguir debatiendo al respecto.

JOSÉ ALBERTO REYES GARCÍA dijo...

Tema: Realidad Universitaria

Son las 6:00 AM cada quien se levanta para ir a clases a la universidad, un chofer de autobús atropello a un estudiante… Y comenzó el problema afectar a la población estudiantil en general; unos se preguntan si es por que es fin de semestre o llego diciembre y necesitan fomentar el desorden y alborotarse los vividores políticos que al parecer creen que la casa de estudios es un ancianato; ya que llevan tiempo estudiando y nunca se gradúan, lo cierto es que se armo una gran marcha y ya la policía junto a la guardia nacional ha herido a varios estudiantes, unos se encuentran heridos de gravedad recluidos en el hospital publico mas cercano de donde esta ocurriendo la manifestación. Ellos creen que por manifestar revolucionarios son y están originando un proceso de cambio, pero no saben que en realidad lo que están haciendo es perjudicando la academia y el intelecto de los demás estudiantes que creen en ideologías diferentes a las de ellos y si respetan la pluralidad. El conocimiento de la educación que se les ha impartido al parecer no ha llegado a sus cerebros ya que son victimas de confundir la política idealista con la ambición, hoy el personal de confianza del gobierno de turno han repartido una gran cantidad de publicidad para convocar a una tertulia nacional que nos lleva a su terreno de juego convirtiéndonos en payasos de circos en donde ellos con el dinero de la nación arman el espectáculo para hacerse llamar lideres y algunos ya creen que por que son estudiantes afectos a un partido son los portadores de la verdad absoluta cuando solo son utilizados como títeres simulando ser peones en un tablero de ajedrez; pero sin embargo los peones defienden el juego para vencer y poder ganarlo actuando con el pensamiento y la inteligencia de un jugador sabio e inteligente. Todo lo contrario a este ejemplo antes mencionados suelen ser esos ciudadanos ya que ellos actúan como maquinas de demolición que destruyen las esperanzas y sueños de otros estudiantes con esto solo espero que el gobierno de turno y las autoridades universitarias que estén en su gestión apoyen el conocimiento significativo y no destructivo por que muchas veces los mismos son los culpables de estas conductas que propician las masas.

Jose Alberto Reyes Garcia
Dirigente Estudiantil Nacional

JOSÉ ALBERTO REYES GARCÍA dijo...

Tema: Voces De Pasillos

Día lento, totalmente nublado donde los pensamientos viven soñando con un futuro bendito, nuestros corazones sienten cada segundo que pasa las emociones mas fuertes que existen en el mundo pero solo las miradas de vuestros ojos observan lo que sucede a nuestro alrededor. Voces se hacen sentir, comentarios caminan al aire libre pues muchos ya creen que encontraron el camino, otros simplemente sueñan con encontrarlo y otros andan en la búsqueda por que su camino no es la fantasía ni mucho menos la hipocresía.

Tal vez existamos personas rebeldes e inmaduras esto es muy comunes en los jóvenes los cuales tratan de adquirir los mejores conocimientos que la vida les conceda. Otros simplemente seguimos siendo guerreros presentes en la batalla que se fortalecen ante la critica que proviene de un grupo de personas que todavía no han aprendido que la envidia es dañina y destruye el amor que esta presente en cada corazón y pensamiento nuestro, simplemente se creen superiores y mejores que los demás pero no saben que las personas humildes también valen y tienen sentimientos hermosos tanto es así que muchas veces vencen con la constancia, el trabajo y el querer poder los obstáculos que la vida nos presenta en el camino.

Siempre buscamos con el corazón en la mano como estandarte de una brújula nuestro norte verdadero guiados por nuestros pensamientos para encontrar el camino hacia la paz y la alegría de nuestra patria y aunque a veces solo nos vemos como soñadores tratamos de intentarlo, ya que ante escenas de políticos corruptos y de allegados del gobierno de turno que lastiman a la patria nuestros ojos lloran, pues creemos que en nuestra sangre esta el sentimiento verdadero y el amor por nuestra patria. Tal vez no seamos un simón Bolívar ni un Francisco De Miranda pero si estamos llenos de amor por nuestro país y dispuestos a luchar con deseos, sueños y proyectos de gran bienestar para este lindo país en donde dios nos dio la gloriosa oportunidad de nacer.


Jose Alberto Reyes Garcia
Dirigente Estudiantil Nacional
Estudios Internacionales UCV

Luis Santiago dijo...

Primero que todo, deseo felicitar esta iniciativa, ProMedio, que se esfuerza en construir espacios de diálogo en campos que aparentan ser minados y cerrados con alambre púa. Verdaderamente se trata de aceras distintas que transitamos con aparente intención de no girar el cuello y admitir que la otra está poblada, cuando resulta ser que ese pequeño esfuerzo muscular terminaría de demostrarnos que en el medio está una calle de asfalto caliente, moldeable y muy golpeado, que se llama Venezuela. Independientemente de los bandos que representemos, nuestras aceras y nosotros los transeúntes nos debemos a esta calle, a su reconstrucción y a la creación de las otroras caminerías que conectaban a la sociedad en pos de avanzar hacia adelante fuertemente, a toda marcha, sin prisa pero sin demora. Continúen el esfuerzo, muchachos, porque la labor de pico y pala para recrear los espacios de diálogo y entendernos de acera a acera, sin gritar, es dura y larga. Llámenme demasiado optimista, pero al igual que ustedes creo que sí se puede.

En cuanto al tema de la Autonomía, se trata de una situación bastante álgida: si bien las universidades autónomas de Venezuela están pobladas de bemoles burocráticos, politiqueros e incluso de infraestructura, ello no se traduce en un comodín de intervencionismo que se pueda jugar libremente. Creo de forma firme que los estudiantes, profesores realmente interesados y autoridades con tanto amor a la Academia como el que poseemos los que nos dedicamos a abogar por ella en cualquier arena, estamos suficientemente facultos para incentivar y tomar en nuestras propias manos la reconstrucción de nuestras Alma Mater. Y el que no se sienta en capacidad de así hacerlo, tristemente ha asumido torcido un compromiso impreso en su hoja de vida desde el momento en el que entra en una universidad autónoma.

Decir que necesitamos ayuda del gobierno (o del Estado, porque la ingerencia se está llevando más allá del Poder Ejecutivo y está pasando al cuerpo Legislativo, con la nueva Ley Bolivariana de Universidades) es tildarnos, por lo mínimo, de oligofrénicos funcionales. ¿Acaso no estamos en capacidad de demandar una educación de altura? ¿Acaso no tenemos el nivel para exigir a maestros patrones de la ineficiencia una labor prolija? ¿O es que nos faltan cuerdas vocales y manos para exigir y construir infraestructuras, tanto de cemento como de saber, para levantar la Academia más allá del suelo? Creo que los estudiantes debemos darnos un voto mayor de confianza, y acometer con cuernos, lanzas y especialmente libros y sapiencia, la labor que generaciones del pasado emprendieron para hacer de la Educación Universitaria una Educación de Altura, principal teniente de un doble papel: el de crítica y el de constructora del porvenir nacional.

Y es que considerar desde un gobierno destruir la autonomía universitaria es, por lo menos, poner un revólver sobre la sien del país. Las universidades sobreviven a los gobiernos y mantienen una línea crítica, de ideas y de Academia, desde la cual nacen los proyectos de país y sus distintas esferas -tan disímiles entre ellas como las carreras que cursamos en nuestras aulas- y desde la que se ilumina el camino de la evolución nacional. Quitarnos ese farol es, en pocas palabras, enfilar directo hacia el tormentoso mar de la incongruencia.

Nuestro trabajo, como universitarios, como estudiantes, profesores y autoridades, es marcarle a Venezuela el rumbo en el cada vez más complicado mapa de la vida en comunidad, en Nación, Estado y Gobierno. No existe justificación alguna válida para quitarnos ese rol que históricamente se nos ha consagrado, como guardianes del conocimiento científico y humanístico. No existe argumento suficientemente bueno para decir que las universidades harían un mejor papel empapadas en un proyecto político llevado a cabo por una instancia al final transitoria.

¿Que tenemos que preguntarnos si estamos llevando a cabo esa labor de guía de Patria? Es cierto. Efectivamente hemos estado de medio lado (y no de espalda, porque nunca le podremos dar la espalda al país que nos alberga a todos y cada uno de nosotros), por lo que nuestro trabajo hacia Venezuela se ha de redimensionar. Pero es una discusión que llevaremos nosotros adentro, adentro de nuestra Autonomía y de nuestra propia conciencia cívica, sin que ningún ente administrativo se inmiscuya.

Créense más espacios para la educación superior. Son necesarios, imperativos, para continuar avanzando. Como dice Leonardo arriba, es necesario crear nuevos espacios de formación técnica -porque de puras carreras de 5 años no crece una economía-, y reforzar fuertemente la ya vapuleada educación básica y media. Son tareas adicionales que es necesario emprender, con la siempre guía luz de las universidades. Y si hay más universidades, mejor: así más voces disentirán o aprobarán la gestión estatal, y aportarán las críticas o reformas necesarias. Nunca estaremos contra la apertura de nuevos espacios del conocimiento... sería absolutamente ilógico de parte de un universitario.

Ya basta con la búsqueda a ultranza de chivos expiatorios. Ya basta con la destrucción de los pocos entes que todavía articulan un país a punto de desarticulación completa. Ya basta de destruir. En vez de eso, construyamos. Comencemos, que la lista de lo que que hace falta por crear y cambiar es muy larga.